Despues de barajar varias posibilidades he decidido no comprarme ningun coche.
En el caso de los vendedores de coches de ocasion, han puesto el liston en unos 5000 euros. No coches más baratos.
En el caso de concesionarios hay más variedad. El coche más barato que encontré fue un skoda por 2000 euros. Lo normal, unos 3000. Son coches entregados al comprar uno nuevo. Seguramente al anterior dueño le dieron 1000 euros y a mi me piden 3000.
Vi un Daewoo que me gustó, pero eran 3500 euros. Demasiado.
De coches más baratos solo vi un Ibiza de primera generación, y pedían 1000 euros (yo hubiera dado 100 euros como mucho).
Estaba pensando (ya para el próximo año) cuanto me costaría comprarme un coche y dejarlo en un parking todo el año. Y también qué problemas tendría el coche de estar parado (totalmente parado) durante 11 meses.
Bueno, una idea más a tener en cuenta. Ya veremos.
:-)
Honda Civic LSi
Mi primer coche
21 de agosto de 2007
13 de agosto de 2007
De vacaciones
Del 20/8/2007 al 11/9/2007 estaré de vacaciones. Buena parte de esos días estaré en A Coruña, mi segudo hogar (quizás algún día el primero, quien sabe).
En A Coruña intentaré alquilar un coche. Muchas compañías piden un año de experiencia, pero yo lo probaré igualmente. Si cuela, cuela.
Como ya se que el aquiler será misión imposible, probaré de comprar un coche. Uno baratito, 800 euros máximo. Pero que funcione y esté bien (si lo tengo que llevar al mecánico ya no me sirve). Luego a la chatarra y listos.
Otra opción es comprar un coche de 1500 euros y luego venderlo por unos 800-900. Como a mediados septiembre me vuelvo para Barcelona, puedo aprovechar que algunos alumnos de autoescuela ya se habrán presentado a examen y habrán aprovado. Y querrán coche.
La última opción es no usar coche (taxi, como máximo), en cuyo caso poco tendré que explicar.
De todas las opciones, la más probable es la última. Por tanto, mi blog hará las mismas vacaciones que yo.
O sea, nos vemos en Septiembre (a mediados de septiembre).
¡¡¡ Buen verano a tod@s !!!
:-)
En A Coruña intentaré alquilar un coche. Muchas compañías piden un año de experiencia, pero yo lo probaré igualmente. Si cuela, cuela.
Como ya se que el aquiler será misión imposible, probaré de comprar un coche. Uno baratito, 800 euros máximo. Pero que funcione y esté bien (si lo tengo que llevar al mecánico ya no me sirve). Luego a la chatarra y listos.
Otra opción es comprar un coche de 1500 euros y luego venderlo por unos 800-900. Como a mediados septiembre me vuelvo para Barcelona, puedo aprovechar que algunos alumnos de autoescuela ya se habrán presentado a examen y habrán aprovado. Y querrán coche.
La última opción es no usar coche (taxi, como máximo), en cuyo caso poco tendré que explicar.
De todas las opciones, la más probable es la última. Por tanto, mi blog hará las mismas vacaciones que yo.
O sea, nos vemos en Septiembre (a mediados de septiembre).
¡¡¡ Buen verano a tod@s !!!
:-)
11 de agosto de 2007
Una ardilla asustada
Vacaciones
Hoy era mi último día en el trabajo. No porque cambie de trabajo (aún no) sino porque hoy empezaba mis vacaciones. Hasta el 11 de septiembre.
Caldes de Montbui
Me fuí hasta Caldes de Montbui. Buscaba un restaurante donde comer, pero los que llevaba mi GPS debían estar anticuados, porque miré dos y no vi que fuera restaurantes.
Al final encontré un Caprabo y compré un par de cosillas. Usé mi coche como mi restaurante particular.
La llegada a Caldes fue un poco accidentada, porque mi GPS me metió por un camino sólo apto para todoterrenos. Por suerte era un camino de tierra. Digo por suerte porque al salir de ese camino rasqué un poco los bajos. Anduve buen rato preocupado que no le hubiera hecho nada a la mecánica, pero aparentemente no pasó nada.
Sentmenat
Desde Caldes me fuí a Sentmenat. En realidad no tenía planeado ir a ese pueblo, yo quería ir a las montañas que veía desde Caldes. Pero no lo conseguí.
Y como tenía hambre, decidí buscar un sitio con sombra en Sentmenat y comer lo que había comprado. Como soy un tío listo, vi una calle que tenía el asfalto un poco viejo. A su lado una nueva calle, con el asfalto más nuevo, servía para que los coches circularan.
Al ver esa calle casi abandonada, pensé que ya no se usaba para nada, y me metí en ella. Aparqué bajos unos árboles que daban una sombra muy agradable. Y aparqué en el lado izquierdo, así cuando me bajaba daba directamente a una plazoleta, en vez de al asfalto.
Al cabo de un rato ví venir un autobús urbano hacia mí. Comprendí que aquella calle no se usaba casi por el tráfico privado (que usaba la calle paralela, con mejor asfalto), pero sí la usaba el tráfico público.
El autobús me esquivó y siguió hasta la parada. Por tanto descubrí que había aparcado en el lado izquierdo de una vía de doble sentido y encima lo había hecho en contra dirección. ¡¡ Toma normas !!.
Castellar del Vallés
Desde Sentmenat, después de haber comido y transgredido unas cuantas normas de circulación, me fuí para Castellar del Vallés.
Cuando anduve callejeando por sus calles me dí cuenta que ya había estado, porque una calle la reconocí, y a partir de ella encontré otras que también me eran conocidas.
Sant Llorenç Savall
Desde Castellar me fuí a Sant Llorenç Savall, un pueblecito entre montañas, muy bonito.
Al salir de ese pueblo cogí la BP-1241. Cogí ésta carretera por error, porque andaba callejeando y una calle me llevó a ésta carretera, y luego no tuve ganas de dar media vuelta.
Esa carretera va hacía Sant Feliu de Codines, pasando antes por Gallija. Es una carretera comarcal. Caben dos coches, pero han de pasar muy juntitos. Por tanto, hay que ir muy pendiente que no haya peatones y que no venga un coche de frente.
Una carretera muy solitaria, encontré pocos coches, un par de motos, algunos peatones, y poco más. ¡¡ Ah sí !! Una ardilla, poco antes de llegar a Gallija.
La ardilla cruzó la carretera y se encaramó a una roca. Aún recuerdo el sonido de sus uñas rascando la roca, intentando no caerse. Y lo consiguió, se quedó bien agarrada a la roca.
Sant Feliu de Codines
En Sant Feliu de Codines no me paré. Programé el GPS para volver a Barcelona. El GPS me llevó hacia la C-59. En ese camino pasé al lado de un perro abandonado que no hacía otra cosa que caminar en la misma dirección, sin amo, haciendo eses.
Haciendo eses porque se iba del arcén a la calzada, al lado de los coches, y de ahí volvía al arcén. No se si intentaba cruzar la carretera y al ver tráfico se volvía, o esperaba encontrar a su dueño. No vi que llevara collar, quizás su anterior dueño se lo quitó antes de abandonarlo.
Me dió mucha pena la cara que ponía el perro, la tristeza de sus ojos. Estuve tentado de pararme y subirlo a mi coche.
Pero ... ¿qué hago yo con un perro?
Seguí mi camino hasta Barcelona.
Espero que aquel perro haya tenido una suerte que no pase por la perrera.
Hoy era mi último día en el trabajo. No porque cambie de trabajo (aún no) sino porque hoy empezaba mis vacaciones. Hasta el 11 de septiembre.
Caldes de Montbui
Me fuí hasta Caldes de Montbui. Buscaba un restaurante donde comer, pero los que llevaba mi GPS debían estar anticuados, porque miré dos y no vi que fuera restaurantes.
Al final encontré un Caprabo y compré un par de cosillas. Usé mi coche como mi restaurante particular.
La llegada a Caldes fue un poco accidentada, porque mi GPS me metió por un camino sólo apto para todoterrenos. Por suerte era un camino de tierra. Digo por suerte porque al salir de ese camino rasqué un poco los bajos. Anduve buen rato preocupado que no le hubiera hecho nada a la mecánica, pero aparentemente no pasó nada.
Sentmenat
Desde Caldes me fuí a Sentmenat. En realidad no tenía planeado ir a ese pueblo, yo quería ir a las montañas que veía desde Caldes. Pero no lo conseguí.
Y como tenía hambre, decidí buscar un sitio con sombra en Sentmenat y comer lo que había comprado. Como soy un tío listo, vi una calle que tenía el asfalto un poco viejo. A su lado una nueva calle, con el asfalto más nuevo, servía para que los coches circularan.
Al ver esa calle casi abandonada, pensé que ya no se usaba para nada, y me metí en ella. Aparqué bajos unos árboles que daban una sombra muy agradable. Y aparqué en el lado izquierdo, así cuando me bajaba daba directamente a una plazoleta, en vez de al asfalto.
Al cabo de un rato ví venir un autobús urbano hacia mí. Comprendí que aquella calle no se usaba casi por el tráfico privado (que usaba la calle paralela, con mejor asfalto), pero sí la usaba el tráfico público.
El autobús me esquivó y siguió hasta la parada. Por tanto descubrí que había aparcado en el lado izquierdo de una vía de doble sentido y encima lo había hecho en contra dirección. ¡¡ Toma normas !!.
Castellar del Vallés
Desde Sentmenat, después de haber comido y transgredido unas cuantas normas de circulación, me fuí para Castellar del Vallés.
Cuando anduve callejeando por sus calles me dí cuenta que ya había estado, porque una calle la reconocí, y a partir de ella encontré otras que también me eran conocidas.
Sant Llorenç Savall
Desde Castellar me fuí a Sant Llorenç Savall, un pueblecito entre montañas, muy bonito.
Al salir de ese pueblo cogí la BP-1241. Cogí ésta carretera por error, porque andaba callejeando y una calle me llevó a ésta carretera, y luego no tuve ganas de dar media vuelta.
Esa carretera va hacía Sant Feliu de Codines, pasando antes por Gallija. Es una carretera comarcal. Caben dos coches, pero han de pasar muy juntitos. Por tanto, hay que ir muy pendiente que no haya peatones y que no venga un coche de frente.
Una carretera muy solitaria, encontré pocos coches, un par de motos, algunos peatones, y poco más. ¡¡ Ah sí !! Una ardilla, poco antes de llegar a Gallija.
La ardilla cruzó la carretera y se encaramó a una roca. Aún recuerdo el sonido de sus uñas rascando la roca, intentando no caerse. Y lo consiguió, se quedó bien agarrada a la roca.
Sant Feliu de Codines
En Sant Feliu de Codines no me paré. Programé el GPS para volver a Barcelona. El GPS me llevó hacia la C-59. En ese camino pasé al lado de un perro abandonado que no hacía otra cosa que caminar en la misma dirección, sin amo, haciendo eses.
Haciendo eses porque se iba del arcén a la calzada, al lado de los coches, y de ahí volvía al arcén. No se si intentaba cruzar la carretera y al ver tráfico se volvía, o esperaba encontrar a su dueño. No vi que llevara collar, quizás su anterior dueño se lo quitó antes de abandonarlo.
Me dió mucha pena la cara que ponía el perro, la tristeza de sus ojos. Estuve tentado de pararme y subirlo a mi coche.
Pero ... ¿qué hago yo con un perro?
Seguí mi camino hasta Barcelona.
Espero que aquel perro haya tenido una suerte que no pase por la perrera.
10 de agosto de 2007
6000 Kilómetros
Bueno, para ser exactos unos 5800 Km.
Son los kilómetros que he hecho con mi Civic. En tres meses. Casi no me creo que haya hecho tantos kilómetros.
:-)
Son los kilómetros que he hecho con mi Civic. En tres meses. Casi no me creo que haya hecho tantos kilómetros.
:-)
Sant Pol de Mar
Había elegido en mi GPS un destino un poco más lejos de lo habitual (no tanto como Tarragona o Gerona). Y que estuviera en la costa.
El elegido fue Sant Pol de Mar . Fui por la autopista, desde Barcelona. Dos peajes me tragué.
Pero no me quedé en Sant Pol. Cuando llegué vi que había calles muy estrechitas y pasé de meter mi coche en lios (o sea, rascadas).
Seguí recto.
Acabé en Pineda de Mar, en la Calle de l'Empordà, al lado de una plaza.
Anduve un rato (a pie) por Pineda. En la Avda. Mediterráneo me tomé un café. Me compré un estuche para mi GPS (cuando lo guardo en la mochila siempre tengo miedo que se ralle la pantalla) y poco más.
Realmente recorrí tres o cuatro manzanas de casas, así que del pueblo poco ví. Otro día será.
Cuando volví, programé el GPS para que hiciera un recorrido sin pasar por peajes. Me metió en la autopista, pero un poco antes del primer peaje me sacó, hacia la N-II.
Por esa carretera estuve circulando muchos kilómetros. Pasé por Mataró (recordé que por allí había pasado hace unas semanas, cuando cuando Carme y sus perros competían en el Agility de Mataró) y el Masnou.
En Masnou la N-II estaba cortada. Vi un letrero que lo indicaba pero no reaccioné a tiempo y seguí recto. Acabé en un tramo de carretera que era de uso exclusivo para los vecinos.
Como si de un vecino se tratara, cogí aquella calle y a seguir circulado, que tengo coche, je je. Anduve callejeando un poco. Había unas casitas muy monas. Unos chalets adosados que casi hacen que me pare y compre uno (justo antes de pararme me acordé que soy pobre).
Desde ahí busqué la autopista y para Barcelona.
Mi intención era volver desde Pineda por la N-II, sin coger autopista en ningún momento. No fue posible, una lástima.
:-)
El elegido fue Sant Pol de Mar . Fui por la autopista, desde Barcelona. Dos peajes me tragué.
Pero no me quedé en Sant Pol. Cuando llegué vi que había calles muy estrechitas y pasé de meter mi coche en lios (o sea, rascadas).
Seguí recto.
Acabé en Pineda de Mar, en la Calle de l'Empordà, al lado de una plaza.
Anduve un rato (a pie) por Pineda. En la Avda. Mediterráneo me tomé un café. Me compré un estuche para mi GPS (cuando lo guardo en la mochila siempre tengo miedo que se ralle la pantalla) y poco más.
Realmente recorrí tres o cuatro manzanas de casas, así que del pueblo poco ví. Otro día será.
Cuando volví, programé el GPS para que hiciera un recorrido sin pasar por peajes. Me metió en la autopista, pero un poco antes del primer peaje me sacó, hacia la N-II.
Por esa carretera estuve circulando muchos kilómetros. Pasé por Mataró (recordé que por allí había pasado hace unas semanas, cuando cuando Carme y sus perros competían en el Agility de Mataró) y el Masnou.
En Masnou la N-II estaba cortada. Vi un letrero que lo indicaba pero no reaccioné a tiempo y seguí recto. Acabé en un tramo de carretera que era de uso exclusivo para los vecinos.
Como si de un vecino se tratara, cogí aquella calle y a seguir circulado, que tengo coche, je je. Anduve callejeando un poco. Había unas casitas muy monas. Unos chalets adosados que casi hacen que me pare y compre uno (justo antes de pararme me acordé que soy pobre).
Desde ahí busqué la autopista y para Barcelona.
Mi intención era volver desde Pineda por la N-II, sin coger autopista en ningún momento. No fue posible, una lástima.
:-)
8 de agosto de 2007
Joan Salvat Papasseit
Hay un instituto en Barcelona con ese nombre. En la zona de la Barceloneta. Hoy quise aparcar por allí para irme a la zona de bazares, pero fue imposible.
Bueno, a lo que iba. Yo venía por la calle de La Maquinista, que acaba enfrente de ese instituto. Desemboca en el Paseo de Salvat Papasseit. Un giro de 90 grados a la izquierda.
Donde acaba esa calle no se si está prohibido aparcar o no. Pero había un coche aparcado (cerca esta el dueño, que en seguida se acercó, al ver mis problemas girando).
Al intentar girar, me cerré demasiado y ví que iba a dar con al rueda trasera en el bordillo que quedaba a mi izquierda.
Me paré e intenté tirar hacia atrás. La idea era "volver" la calle de La Maquinista, y volver a hacer el giro, pero esta vez girando un poco a la derecha, para abrirme, y luego girar todo a la izquierda, esperando no pisar bordillo.
Lo intenté. Un turismo impaciente pitó. No se si a mi por estar maniobrando, o al que había aparcado por haber dejado el coche allí. Ignoré por completo los pitidos (que se espere; si tiene prisa, que se compre un avión).
Lo intenté, y algo conseguí abrirme. Pero no lo suficiente. De hecho estuve muy cerca de tocar al otro coche (levanté el cuello y vi que podía hacer el giro).
Por el lado izquierdo, vi que tenía que subirme un poco al bordillo. Y eso hice. Realmente fue muy poco, y me molesta mucho. No por subirme; mientras no pise a ningún peatón no me preocupa mucho subirme al bordillo (en el examen eso es un suspenso directo). Me molesta porque estoy maltratando la mecánica de mi coche. Y eso tarde o temprano pasa factura.
:-)
Bueno, a lo que iba. Yo venía por la calle de La Maquinista, que acaba enfrente de ese instituto. Desemboca en el Paseo de Salvat Papasseit. Un giro de 90 grados a la izquierda.
Donde acaba esa calle no se si está prohibido aparcar o no. Pero había un coche aparcado (cerca esta el dueño, que en seguida se acercó, al ver mis problemas girando).
Al intentar girar, me cerré demasiado y ví que iba a dar con al rueda trasera en el bordillo que quedaba a mi izquierda.
Me paré e intenté tirar hacia atrás. La idea era "volver" la calle de La Maquinista, y volver a hacer el giro, pero esta vez girando un poco a la derecha, para abrirme, y luego girar todo a la izquierda, esperando no pisar bordillo.
Lo intenté. Un turismo impaciente pitó. No se si a mi por estar maniobrando, o al que había aparcado por haber dejado el coche allí. Ignoré por completo los pitidos (que se espere; si tiene prisa, que se compre un avión).
Lo intenté, y algo conseguí abrirme. Pero no lo suficiente. De hecho estuve muy cerca de tocar al otro coche (levanté el cuello y vi que podía hacer el giro).
Por el lado izquierdo, vi que tenía que subirme un poco al bordillo. Y eso hice. Realmente fue muy poco, y me molesta mucho. No por subirme; mientras no pise a ningún peatón no me preocupa mucho subirme al bordillo (en el examen eso es un suspenso directo). Me molesta porque estoy maltratando la mecánica de mi coche. Y eso tarde o temprano pasa factura.
:-)
6 de agosto de 2007
Que llueva, que llueva, la virgen de la cueva....
Se supone que esta canción hace que el cielo pase a estar cubierto de espesas nubes que instantes después descargan con alegría un aguacero.
A Manresa
Al salir de trabajar volvía para Barcelona (y más me hubiese valido seguir hasta casa) por la C-58. Leyendo uno de los paneles, vi que ponía:
"Sabadell, Manresa"
Y pensé:
"Hombre, a Manresa no he ido nunca".
Y para allá me fui.
C-58. C-16 (Autopista de Monserrat, de peaje claro). C-25
En la ida ya vi unas nueves amenazadoras. Nada más llegar a Manresa, empezó a llover. Con algún trueno y algún relámpago. Pensé que sería una tormenta de nada, y no me preocupé.
Callejeando
Estuve callejeando por la ciudad, pensando en pararme en algún sitio y tomarme un agua bien fría. Pero vi todo cerrado. Fui hacia el centro y empecé a ver sitios abiertos, pero no veía donde aparcar (había zona azul, pero yo buscaba algo gratis).
Lluvia torrencial
A medida que circulaba iba notando que cada vez llovía más. Tal es así, que hubo un momento en que, en plena ciudad, estaba totalmente negro. Casi pensé en encender las luces largas. Y acabé encendiendo las antiniebla.
Me vuelvo para casa
Hasta Manresa había venido sin GPS (¡¡ bien !!). Pero para volver, y con esa llueva, decidí conectarlo y dejarme guiar.
Me llevó por una carretera, y parecía que no se acababa nunca. En algunos sitios notaba cómo las ruedas de mi coche pasaban por encima de un gran charco. Temiendo quedarme parado en el agua, mantenía la aceleración.
Notaba que al coche le costaba avanzar. Debía haber mucha agua. En algunos tramos no veía la carretera, no veía las líneas. Veía que de frente venía un coche por sus luces, y procuraba apartarme, pero no demasiado no sea que acabara en la cuneta.
Se empañan las lunas
Sobre todo la delantera. Y eso que puse el aire al máximo y todo dirigido hacia las lunas. Pero nada. Se seguían empañando. Me paré en una gasolinera e intenté limpiarlos con un pañuelo de papel.
Se volvían a empañar. Vi que pasaba un coche, y arranqué. Me metí en la carretera (antes miré que no viniera nadie por ese carril, por supuesto) y aceleré para pillarlo. Al final lo conseguí. Yo iba a ciegas (o casi), y me guiaba por el coche que iba delante mio (sus luces de posición).
Así fui circulando, viendo en el GPS que ya faltaba poco para entrar en la autopista.
Peaje
Al llegar al peaje, pagué con tarjeta, y me paré en un lateral. En se momento no veía absolutamente nada. Llovía mucho, mucho, mucho (vamos, mucho es poco, de lo que llovía). La luna delantera se me empañaba. Y no conseguía desempañarla.
Tuve la idea de hacer lo mismo de antes, de seguir a un coche que pasara, pero no fue posible. No veía por donde iba, y me tuve que parar unos metros mas adelante (raro es que no haya estampado el coche contra la barrera lateral, el quita miedos).
Abrí las ventanas. Se me mojó todo. Y las lunas no se desempañaban. Probé con las manos, limpiando la luna delantera con la mano. Entonces pude ver algo. Activé el limpiaparabrisas (al máximo) y con la mano limpie la luna.
No veía mucho, pero algo sí veía. Y entonces lo vi claro. Tenía que salir de allí, alejarme de la tormenta o se me haría de noche y aún sería peor.
Con los cuatro intermitentes encendidos metí primero y avancé hacia la autopista. Recuerdo que vi cómo superaba la línea blanca derecha, y giré hacia la izquierda, para volver al centro del carril de aceleración.
En la autopista
En la autopista iba a unos 40-50 Km/h. Iba en cuarta. Al coche le costaba acelerar, no se si por el viento o por el agua. En ningún momento noté un derrape o una pérdida de adherencia (los neumáticos están en perfecto estado).
Con la mano iba limpiando la luna delantera. Ese "despiste" hacía que estuviera a punto de salirme de la autopista varias veces. Parecía un borracho conduciendo.
Intermitentes
A unos cientos de metros vi los intermitentes de un coche y de una moto (en una curva a izquierdas). Intenté acelerar un poco para llegarme hasta ellos y formar una caravana.
Tanto me acerqué que casi me como la moto. Tuve que frenar.
A distancia de ellos, mantuve la posición. Me fueron de gran ayuda. Ahora estoy pensando que el motorista debió de pasarlo realmente muy mal (más adelante, ya cerca de Barcelona, vi varios motoristas parados bajo un puente, esperando que dejara de llover).
Aclara
Unos kilómetros después, me alejé de la tormenta. El asfalto estaba seco, y cada vez había más luz. Entonces decidí que tenía que llegar lo antes posible a Barcelona.
Aceleré. Me importó un bledo mi "L". Superé los 100 Km/h con creces. Hasta que no llegué a la C-58, no aflojé.
Mientras iba cagando leches, escapando de la tormenta, probé a poner el limpiaparabrisas pero con aire caliente. Esta vez se desempañó del todo, pero yo empecé a sudar de mala manera.
En Barcelona
Al llegar a Barcelona, bajé las ventas y dejé que entrara el aire. Me fui hasta Zona Universitaria, y allí aparqué.
Y respiré aliviado.
Epílogo
Hasta ahora había conducido muy poco con lluvia. Recuerdo un día que fui a trabajar que también me llovió un montón. Pero lo de hoy ha sido demasiado.
Necesito recuperarme.
:-)
A Manresa
Al salir de trabajar volvía para Barcelona (y más me hubiese valido seguir hasta casa) por la C-58. Leyendo uno de los paneles, vi que ponía:
"Sabadell, Manresa"
Y pensé:
"Hombre, a Manresa no he ido nunca".
Y para allá me fui.
C-58. C-16 (Autopista de Monserrat, de peaje claro). C-25
En la ida ya vi unas nueves amenazadoras. Nada más llegar a Manresa, empezó a llover. Con algún trueno y algún relámpago. Pensé que sería una tormenta de nada, y no me preocupé.
Callejeando
Estuve callejeando por la ciudad, pensando en pararme en algún sitio y tomarme un agua bien fría. Pero vi todo cerrado. Fui hacia el centro y empecé a ver sitios abiertos, pero no veía donde aparcar (había zona azul, pero yo buscaba algo gratis).
Lluvia torrencial
A medida que circulaba iba notando que cada vez llovía más. Tal es así, que hubo un momento en que, en plena ciudad, estaba totalmente negro. Casi pensé en encender las luces largas. Y acabé encendiendo las antiniebla.
Me vuelvo para casa
Hasta Manresa había venido sin GPS (¡¡ bien !!). Pero para volver, y con esa llueva, decidí conectarlo y dejarme guiar.
Me llevó por una carretera, y parecía que no se acababa nunca. En algunos sitios notaba cómo las ruedas de mi coche pasaban por encima de un gran charco. Temiendo quedarme parado en el agua, mantenía la aceleración.
Notaba que al coche le costaba avanzar. Debía haber mucha agua. En algunos tramos no veía la carretera, no veía las líneas. Veía que de frente venía un coche por sus luces, y procuraba apartarme, pero no demasiado no sea que acabara en la cuneta.
Se empañan las lunas
Sobre todo la delantera. Y eso que puse el aire al máximo y todo dirigido hacia las lunas. Pero nada. Se seguían empañando. Me paré en una gasolinera e intenté limpiarlos con un pañuelo de papel.
Se volvían a empañar. Vi que pasaba un coche, y arranqué. Me metí en la carretera (antes miré que no viniera nadie por ese carril, por supuesto) y aceleré para pillarlo. Al final lo conseguí. Yo iba a ciegas (o casi), y me guiaba por el coche que iba delante mio (sus luces de posición).
Así fui circulando, viendo en el GPS que ya faltaba poco para entrar en la autopista.
Peaje
Al llegar al peaje, pagué con tarjeta, y me paré en un lateral. En se momento no veía absolutamente nada. Llovía mucho, mucho, mucho (vamos, mucho es poco, de lo que llovía). La luna delantera se me empañaba. Y no conseguía desempañarla.
Tuve la idea de hacer lo mismo de antes, de seguir a un coche que pasara, pero no fue posible. No veía por donde iba, y me tuve que parar unos metros mas adelante (raro es que no haya estampado el coche contra la barrera lateral, el quita miedos).
Abrí las ventanas. Se me mojó todo. Y las lunas no se desempañaban. Probé con las manos, limpiando la luna delantera con la mano. Entonces pude ver algo. Activé el limpiaparabrisas (al máximo) y con la mano limpie la luna.
No veía mucho, pero algo sí veía. Y entonces lo vi claro. Tenía que salir de allí, alejarme de la tormenta o se me haría de noche y aún sería peor.
Con los cuatro intermitentes encendidos metí primero y avancé hacia la autopista. Recuerdo que vi cómo superaba la línea blanca derecha, y giré hacia la izquierda, para volver al centro del carril de aceleración.
En la autopista
En la autopista iba a unos 40-50 Km/h. Iba en cuarta. Al coche le costaba acelerar, no se si por el viento o por el agua. En ningún momento noté un derrape o una pérdida de adherencia (los neumáticos están en perfecto estado).
Con la mano iba limpiando la luna delantera. Ese "despiste" hacía que estuviera a punto de salirme de la autopista varias veces. Parecía un borracho conduciendo.
Intermitentes
A unos cientos de metros vi los intermitentes de un coche y de una moto (en una curva a izquierdas). Intenté acelerar un poco para llegarme hasta ellos y formar una caravana.
Tanto me acerqué que casi me como la moto. Tuve que frenar.
A distancia de ellos, mantuve la posición. Me fueron de gran ayuda. Ahora estoy pensando que el motorista debió de pasarlo realmente muy mal (más adelante, ya cerca de Barcelona, vi varios motoristas parados bajo un puente, esperando que dejara de llover).
Aclara
Unos kilómetros después, me alejé de la tormenta. El asfalto estaba seco, y cada vez había más luz. Entonces decidí que tenía que llegar lo antes posible a Barcelona.
Aceleré. Me importó un bledo mi "L". Superé los 100 Km/h con creces. Hasta que no llegué a la C-58, no aflojé.
Mientras iba cagando leches, escapando de la tormenta, probé a poner el limpiaparabrisas pero con aire caliente. Esta vez se desempañó del todo, pero yo empecé a sudar de mala manera.
En Barcelona
Al llegar a Barcelona, bajé las ventas y dejé que entrara el aire. Me fui hasta Zona Universitaria, y allí aparqué.
Y respiré aliviado.
Epílogo
Hasta ahora había conducido muy poco con lluvia. Recuerdo un día que fui a trabajar que también me llovió un montón. Pero lo de hoy ha sido demasiado.
Necesito recuperarme.
:-)
Cagada (bueno, casi)
Entrada 10 de la Ronda de Dalt, dirección Besós (en la imagen anterior, mirando hacia la derecha).
Esa entrada tiene un carril de aceleración largo que he recorrido muchas veces, durante muchos años, pues por ahí entra el Bus 60; yo lo cogía para volver a casa.
Hoy probé a entrar y casi me meto un castañazo contra (creo) un Ibiza rojo (era rojo, lo que no se si era Ibiza, pero creo que sí).
La cosa es que yo iba acelerando, pero sin ver nada aún del carril derecho. Delante mio, a una cierta distancia de mí, un turismo entra sin problemas. Detrás de él, nadie.
Al llegar a los últimos 20 metros, entonces ya veo el carril derecho. Veo un coche blanco más atrás, por lo que tengo suficiente hueco para entrar. Acelero más.
Y entonces pitada. Sonora pitada. Giro ligeramente la cabeza y veo un ibiza (ya digo que creo que era un Ibiza) rojo. Lo veo muy cerca e imagino que ha frenado para no chocar conmigo.
Si freno, malo. Así que acelero un poco más y entro. Queda detrás mio. Con la mano le pido disculpas.
Causa del error (o sea, de la cagada mia): el ángulo muerto.
Porque cuando miré el retrovisor izquierdo, no vi para nada a ese coche. Vi otro blanco que iba detrás, pero el rojo no.
Epílogo
Francamente no se si hice bien en acelerar o debería haber frenado. Yo vi el coche a mi lado, pero un poco atrás y pensé que mejor acelerar.
Disculas
Por último, mis disculpas al conductor del Ibiza. Debería haber entrado más despacio, así hubiera podido frenar sin invadir su carril. Por desgracia el ángulo muerto me jugó una mala pasada (y no es la primera).
PD: Josep, ya se lo que me comentastes hace bastante tiempo ya, que girara un poco la cabeza y no me fiara del retrovisor, pero ya ves, son cosas que me cuesta aprender.
Esa entrada tiene un carril de aceleración largo que he recorrido muchas veces, durante muchos años, pues por ahí entra el Bus 60; yo lo cogía para volver a casa.
Hoy probé a entrar y casi me meto un castañazo contra (creo) un Ibiza rojo (era rojo, lo que no se si era Ibiza, pero creo que sí).
La cosa es que yo iba acelerando, pero sin ver nada aún del carril derecho. Delante mio, a una cierta distancia de mí, un turismo entra sin problemas. Detrás de él, nadie.
Al llegar a los últimos 20 metros, entonces ya veo el carril derecho. Veo un coche blanco más atrás, por lo que tengo suficiente hueco para entrar. Acelero más.
Y entonces pitada. Sonora pitada. Giro ligeramente la cabeza y veo un ibiza (ya digo que creo que era un Ibiza) rojo. Lo veo muy cerca e imagino que ha frenado para no chocar conmigo.
Si freno, malo. Así que acelero un poco más y entro. Queda detrás mio. Con la mano le pido disculpas.
Causa del error (o sea, de la cagada mia): el ángulo muerto.
Porque cuando miré el retrovisor izquierdo, no vi para nada a ese coche. Vi otro blanco que iba detrás, pero el rojo no.
Epílogo
Francamente no se si hice bien en acelerar o debería haber frenado. Yo vi el coche a mi lado, pero un poco atrás y pensé que mejor acelerar.
Disculas
Por último, mis disculpas al conductor del Ibiza. Debería haber entrado más despacio, así hubiera podido frenar sin invadir su carril. Por desgracia el ángulo muerto me jugó una mala pasada (y no es la primera).
PD: Josep, ya se lo que me comentastes hace bastante tiempo ya, que girara un poco la cabeza y no me fiara del retrovisor, pero ya ves, son cosas que me cuesta aprender.
4 de agosto de 2007
Cambio de carril sin mirar
Cuando volví de Cervelló/Vallirana (ver entrada anterior) entré por Gran Via. Sinceramente no sabía por qué parte de Gran Vía estaba entrando.
Yo conozco más el tramo cercano a Glorias, pero ésta vez entré por la parte de Hospitalet/Cornellà (o sea, el lado opuesto).
Me mantuve en Gran Via todo el rato. Iba por el carril de más a la derecha. Tras pasar Plaza España (se pasa por debajo) me encontré con:
a) un autobús urbano que quería entrar en Gran Vía (hay un carril bus nada más salir de ese "túnel"). Se paró.
b) un carril bus casi delante mio.
El autobús me sorprendió; al mirar más adelante ví el carril bus y recordé que en ese tramo vienen autobuses desde Plaza España.
Y el carril bus me obligaba a hacer un cambio de carril. A la salida de Plaza España el carril de más a la derecha en Gran Vía se convierte en carril bus.
Y entonces lo hize mal. Porque me cambié sin mirar, a saco, y acabé delante de un miniautocar, pero a poca distancia de él (supongo que frenó). Normalmente controlo bastante los cambios de carril. Dejando de lado los ángulos muertos (hasta ahora he visto el movimiento del vehículo contiguo por el rabillo del ojo), suelo mirar mucho que no venga nadie. Pero esta vez pegué un volantazo y hala, al carril de mi izquierda.
Es curioso, porque ese mismo miniautocar iba delante mio hacía unos minutos, y se cambió de carril a la izquierda, antes de llegar a Plaza España. Cuando se cambió me chocó, porque no entendía porque no seguía por la derecha. Eso fue antes de entrar en Plaza España. A la salida de Plaza España descubrí el porqué de ese cambio de carril.
Por suerte no pasó nada. Lo más probable es que el conductor de ese miniautocar viera que yo iba directo hacia el carril bus, y que me cambiaría. Sea como sea, no pasó nada (mi angel de la guarda, que hace horas extras).
:-)
Yo conozco más el tramo cercano a Glorias, pero ésta vez entré por la parte de Hospitalet/Cornellà (o sea, el lado opuesto).
Me mantuve en Gran Via todo el rato. Iba por el carril de más a la derecha. Tras pasar Plaza España (se pasa por debajo) me encontré con:
a) un autobús urbano que quería entrar en Gran Vía (hay un carril bus nada más salir de ese "túnel"). Se paró.
b) un carril bus casi delante mio.
El autobús me sorprendió; al mirar más adelante ví el carril bus y recordé que en ese tramo vienen autobuses desde Plaza España.
Y el carril bus me obligaba a hacer un cambio de carril. A la salida de Plaza España el carril de más a la derecha en Gran Vía se convierte en carril bus.
Y entonces lo hize mal. Porque me cambié sin mirar, a saco, y acabé delante de un miniautocar, pero a poca distancia de él (supongo que frenó). Normalmente controlo bastante los cambios de carril. Dejando de lado los ángulos muertos (hasta ahora he visto el movimiento del vehículo contiguo por el rabillo del ojo), suelo mirar mucho que no venga nadie. Pero esta vez pegué un volantazo y hala, al carril de mi izquierda.
Es curioso, porque ese mismo miniautocar iba delante mio hacía unos minutos, y se cambió de carril a la izquierda, antes de llegar a Plaza España. Cuando se cambió me chocó, porque no entendía porque no seguía por la derecha. Eso fue antes de entrar en Plaza España. A la salida de Plaza España descubrí el porqué de ese cambio de carril.
Por suerte no pasó nada. Lo más probable es que el conductor de ese miniautocar viera que yo iba directo hacia el carril bus, y que me cambiaría. Sea como sea, no pasó nada (mi angel de la guarda, que hace horas extras).
:-)
A Vallirana (uy, no!!)
Buscando destinos a los que ir, pensé en Vallirana.
Allí hay un radar meteorológico, que dice en tiempo real dónde llueve. Cubre casi toda Catalunya.
Y para allá me fui. Creo que por la C-32. Pero a pocos quilómetros había un atasco muy grande, justo a la salida de esa autovía.
Llegue a una intersección y vi que si giraba a la izquierda me iba hacia Vallirana, y si a la derecha me iba a Cervelló. Como el atasco iba hacia Vallirana, y hacia Cervelló estaba todo despejado, para allá me fui.
Una población muy bonita, con unas montañas espectaculares. Busqué calles que subieran. Y las encontré. Acabé subiendo un montón. Acabé en la cima de una montaña, con unas vistas impresionantes.
Me estuve un buen rato allí. Cuando volví, le puse a mi GPS como destino el centro de Barcelona. Me llevó hacia una calle que era de tierra, y me decía que continuara recto. Desestimé su consejo. Dí media vuelta y volví a la calle donde había aparcado hacía un ratito.
Desde allí, el viaje de vuelta fue casi por donde había subido. Excepto un tramo, tras pasar un badén, donde me dijo que fuera a la izquierda (yo había subido por la derecha) y me hizo salir a una intersección por la que ya había pasado, así que esta vez no perdí nada.
El resto del viaje, sin problemas. Volví a la C-32 y para Barcelona.
Bajadas. Retención del motor
Aprovecho este post para comentar el tema de las bajadas largas y la retención del motor.
Se supone que el motor ha de retener el coche para no tener que usar mucho los frenos y evitar ese problema de sobrecalentamiento (¿fading era?).
En mi caso bajé casi todo el rato pisando los frenos. Son bajadas de gran desnivel las que hay en Cervelló. Probé a bajar en segunda, pero el coche se iba acelerando, el motor subiendo de vueltas, y haciendo un ruido infernal.
Pasé a tercera, pero ahí retenía aún menos. Pero el motor iba más desahogado. Así que mantuve tercera y fui usando el freno, pensado que si en cualquier momento notaba que dejaba de frenar tiraba del freno de mano y para el motor.
No fue necesario, no.
:-)
Allí hay un radar meteorológico, que dice en tiempo real dónde llueve. Cubre casi toda Catalunya.
Y para allá me fui. Creo que por la C-32. Pero a pocos quilómetros había un atasco muy grande, justo a la salida de esa autovía.
Llegue a una intersección y vi que si giraba a la izquierda me iba hacia Vallirana, y si a la derecha me iba a Cervelló. Como el atasco iba hacia Vallirana, y hacia Cervelló estaba todo despejado, para allá me fui.
Una población muy bonita, con unas montañas espectaculares. Busqué calles que subieran. Y las encontré. Acabé subiendo un montón. Acabé en la cima de una montaña, con unas vistas impresionantes.
Me estuve un buen rato allí. Cuando volví, le puse a mi GPS como destino el centro de Barcelona. Me llevó hacia una calle que era de tierra, y me decía que continuara recto. Desestimé su consejo. Dí media vuelta y volví a la calle donde había aparcado hacía un ratito.
Desde allí, el viaje de vuelta fue casi por donde había subido. Excepto un tramo, tras pasar un badén, donde me dijo que fuera a la izquierda (yo había subido por la derecha) y me hizo salir a una intersección por la que ya había pasado, así que esta vez no perdí nada.
El resto del viaje, sin problemas. Volví a la C-32 y para Barcelona.
Bajadas. Retención del motor
Aprovecho este post para comentar el tema de las bajadas largas y la retención del motor.
Se supone que el motor ha de retener el coche para no tener que usar mucho los frenos y evitar ese problema de sobrecalentamiento (¿fading era?).
En mi caso bajé casi todo el rato pisando los frenos. Son bajadas de gran desnivel las que hay en Cervelló. Probé a bajar en segunda, pero el coche se iba acelerando, el motor subiendo de vueltas, y haciendo un ruido infernal.
Pasé a tercera, pero ahí retenía aún menos. Pero el motor iba más desahogado. Así que mantuve tercera y fui usando el freno, pensado que si en cualquier momento notaba que dejaba de frenar tiraba del freno de mano y para el motor.
No fue necesario, no.
:-)
Protegiendo el asiento del conductor (o sea, mí asiento) (y 2)
Como explicaba aquí, había puesto una especie de cojín o protector para mi asiento.
Pero un día ví que la camiseta blanca que llevaba estaba manchada de negro en la espalda. Es posible que me apoyara en algún sitio y se ensuciara, pero yo diría que fue ese cojín, porque tenia el recubrimiento de piel (sintética) negra.
Así que me he comprado otro similar, pero de tela. Parece que éste no destiñe, aunque no lo he probado tanto rato como el de piel.
Quise comprar uno de esos con cuentas de madera (recomentación de Josep) pero no lo ví, así que probaré éste a ver que tal.
:-)
Pero un día ví que la camiseta blanca que llevaba estaba manchada de negro en la espalda. Es posible que me apoyara en algún sitio y se ensuciara, pero yo diría que fue ese cojín, porque tenia el recubrimiento de piel (sintética) negra.
Así que me he comprado otro similar, pero de tela. Parece que éste no destiñe, aunque no lo he probado tanto rato como el de piel.
Quise comprar uno de esos con cuentas de madera (recomentación de Josep) pero no lo ví, así que probaré éste a ver que tal.
:-)
¿Me voy en coche?¿Me voy en tren? (y 2)
Me voy en tren.
He mirado en un parking y me cobran 180 euros por un mes. Y ese es el tiempo que estaré fuera, más o menos. Así el coche quedará más protegido, que dejarlo un mes entero en la calle.
El 13 me voy, así que aún podré explicar algunas cosas más, je je.
Ahora estoy pensando muy seriamente en comprarme un coche en A Coruña. Baratito (menos de 1000 euros). Y en un mes, volver a venderlo o dejarlo como chatarra (darlo de baja en Tráfico). Así tendría coche durante ese mes.
:-)
He mirado en un parking y me cobran 180 euros por un mes. Y ese es el tiempo que estaré fuera, más o menos. Así el coche quedará más protegido, que dejarlo un mes entero en la calle.
El 13 me voy, así que aún podré explicar algunas cosas más, je je.
Ahora estoy pensando muy seriamente en comprarme un coche en A Coruña. Baratito (menos de 1000 euros). Y en un mes, volver a venderlo o dejarlo como chatarra (darlo de baja en Tráfico). Así tendría coche durante ese mes.
:-)
2 de agosto de 2007
Tapando el agujerito
Un día, al ir a coger mi coche, me encontré con que alguien me había robado mi H, el logo de Honda.
El logo estaba insertado en dos agujeros. Uno de ellos estaba tapado, pero el otro no.
Así que compré una barrita arregla todo y le he metido un trocito. Ahora el agujero queda tapado. Tengo que poner una foto, a ver si me acuerdo.
:-)
El logo estaba insertado en dos agujeros. Uno de ellos estaba tapado, pero el otro no.
Así que compré una barrita arregla todo y le he metido un trocito. Ahora el agujero queda tapado. Tengo que poner una foto, a ver si me acuerdo.
:-)
Pitada
Venía por Calle Aragón. Llegué a calle Tarragona (aquí un mapa de la zona.
Tenía que girar a la izquierda. Y eso empecé a hacer. Hasta que oí una sonora pitada del conductor que iba a mi izquierda.
Resulta que había empezado a girar muy pronto, y le estaba cortando la trayectoria. Realmente tendría que haber girado más tarde.
Así que rectifiqué, volví a una trayectoria recta, y giré cuando realmente tenía que girar (unos metros más adelante, haciendo una L, como diría mi profe de autoescuela).
A pesar de todo el tiempo que llevo conduciendo, aún cometo errores de novatillo.
:-)
Tenía que girar a la izquierda. Y eso empecé a hacer. Hasta que oí una sonora pitada del conductor que iba a mi izquierda.
Resulta que había empezado a girar muy pronto, y le estaba cortando la trayectoria. Realmente tendría que haber girado más tarde.
Así que rectifiqué, volví a una trayectoria recta, y giré cuando realmente tenía que girar (unos metros más adelante, haciendo una L, como diría mi profe de autoescuela).
A pesar de todo el tiempo que llevo conduciendo, aún cometo errores de novatillo.
:-)
1 de agosto de 2007
Sitges
Hoy decidí visitar Sitges.
Desde Barcelona cogí la C-32 (Autopista Pau Casals), y luego la C-31 (Carretera de Barcelona a Valls). Al menos eso es lo que pone el Google Maps, porque yo sólo recuerdo la C-32, la otra era una carretera con muchas curvas, y no recuerdo qué número tenía.
En la ida fui bastante lento, solo superaba los 40-50 Km/h en las rectas. En las curvas, a 40 Km/h (y al salir de la curva aún más lento, porque aceleraba poco).
En la vueta fue al revés, fuí más rápido. Excepto en una curva, donde el coche se me descontroló un poco, en el resto la cosa fue bastante bien, y puede tomar las curvas sin problemas, tanto de subida como de bajada.
Eso me pasa en recorridos con muchas curvas, que tengo miedo de salirme y acelero poco. Por desgracia, cuando cojo algo de confianza igual tomo una curva un pelín más rápido de lo que debería.
El coche hasta la fecha se ha comportado muy bien, así que toda la culpa es mia, je je.
Volviendo para Barcelona me encontré con varios camiones. Uno invadió un poco el sentido contrario en una curva. Yo ya pensé que lo haría, porque era grande y la curva cerrada, así que frené, y finalmente me paré, para que pasara y no tuviera yo ningún problema.
El conductor que iba detrás mio se mosqueó porque me paré, y me pitó. Pero a mi plis, prefiero no chocar contra un camión. Más vale prevenir, dicen. Cierto es que pararme fue excesivo, porque si me hubiera puesto un poco más a la derecha hubieramos cabido los dos, pero eso lo vi después.
Lo que sí me queda claro es que los giros me cuestan aún bastante, tendré que practicar más.
Desde Barcelona cogí la C-32 (Autopista Pau Casals), y luego la C-31 (Carretera de Barcelona a Valls). Al menos eso es lo que pone el Google Maps, porque yo sólo recuerdo la C-32, la otra era una carretera con muchas curvas, y no recuerdo qué número tenía.
En la ida fui bastante lento, solo superaba los 40-50 Km/h en las rectas. En las curvas, a 40 Km/h (y al salir de la curva aún más lento, porque aceleraba poco).
En la vueta fue al revés, fuí más rápido. Excepto en una curva, donde el coche se me descontroló un poco, en el resto la cosa fue bastante bien, y puede tomar las curvas sin problemas, tanto de subida como de bajada.
Eso me pasa en recorridos con muchas curvas, que tengo miedo de salirme y acelero poco. Por desgracia, cuando cojo algo de confianza igual tomo una curva un pelín más rápido de lo que debería.
El coche hasta la fecha se ha comportado muy bien, así que toda la culpa es mia, je je.
Volviendo para Barcelona me encontré con varios camiones. Uno invadió un poco el sentido contrario en una curva. Yo ya pensé que lo haría, porque era grande y la curva cerrada, así que frené, y finalmente me paré, para que pasara y no tuviera yo ningún problema.
El conductor que iba detrás mio se mosqueó porque me paré, y me pitó. Pero a mi plis, prefiero no chocar contra un camión. Más vale prevenir, dicen. Cierto es que pararme fue excesivo, porque si me hubiera puesto un poco más a la derecha hubieramos cabido los dos, pero eso lo vi después.
Lo que sí me queda claro es que los giros me cuestan aún bastante, tendré que practicar más.
Problemas con las mujeres
Ya me ha pasado unas cuantas veces desde que tengo el coche.
Por la mañana.
Voy a entrar en la Ronda de Dalt. Circulación muy muy muy lenta. Lo normal en esos casos es que se deje entrar a un coche cada vez.
O sea, tú vas por tú carril. Delante tuyo, otro coche. Pues el que va delante tuyo deja entrar al primero que está en el carril de aceleración. Luego yo dejo entrar al que estaba segundo (que ahora ya está primero, claro).
Pues en mi caso, estoy en el carril de aceleración. Voy a entrar, confiado en que me dejará entrar, porque el que estaba delante mio ya ha entrado.
Pero no. El turismo que está en el carril al que yo quiero entrar, arranca y se olvida de mí. Cuando miro a la persona, invariablemente es mujer.
No se que les he hecho yo a las mujeres para que me odien así. Tampoco soy tan mal amante.
:-)
(esto levantará ampollas entre las más feministas, pero la realidad es la realidad)
Por la mañana.
Voy a entrar en la Ronda de Dalt. Circulación muy muy muy lenta. Lo normal en esos casos es que se deje entrar a un coche cada vez.
O sea, tú vas por tú carril. Delante tuyo, otro coche. Pues el que va delante tuyo deja entrar al primero que está en el carril de aceleración. Luego yo dejo entrar al que estaba segundo (que ahora ya está primero, claro).
Pues en mi caso, estoy en el carril de aceleración. Voy a entrar, confiado en que me dejará entrar, porque el que estaba delante mio ya ha entrado.
Pero no. El turismo que está en el carril al que yo quiero entrar, arranca y se olvida de mí. Cuando miro a la persona, invariablemente es mujer.
No se que les he hecho yo a las mujeres para que me odien así. Tampoco soy tan mal amante.
:-)
(esto levantará ampollas entre las más feministas, pero la realidad es la realidad)
Joder con la maniobra
En la plaza de Alfoso Comín es donde he vivido experiencias más intensas.
Hoy volvía para casa. Iba subiendo para girar a la derecha (en el carril contiguo está la entrada a la ronda, y hay dos carriles más que continuan por Vall d'Hebron).
Delante mío un turismo. Por el carril de más a la derecha. Se atraviesa como si fuera a meterse en la ronda. Pero se queda parado.
Me paro. Sino, me lo como. Sin patatas fritas.
El turismo vacila, y para mí asombro, gira hacia la izquierda, para seguir subiendo por la plaza de Alfonso Comín. Solo que está encarado hacía la entrada en la ronda. Por tanto va en contra dirección.
Y mira que era fácil. Si hubiera seguido por Vall d'Hebron, unos 30 metros más adelante hay una rotonda donde ese turismo hubiera podido hacer un cambio de sentido sin provocar un caos circulatorio.
¿Llevaría GPS ese conductor?
:-)
Hoy volvía para casa. Iba subiendo para girar a la derecha (en el carril contiguo está la entrada a la ronda, y hay dos carriles más que continuan por Vall d'Hebron).
Delante mío un turismo. Por el carril de más a la derecha. Se atraviesa como si fuera a meterse en la ronda. Pero se queda parado.
Me paro. Sino, me lo como. Sin patatas fritas.
El turismo vacila, y para mí asombro, gira hacia la izquierda, para seguir subiendo por la plaza de Alfonso Comín. Solo que está encarado hacía la entrada en la ronda. Por tanto va en contra dirección.
Y mira que era fácil. Si hubiera seguido por Vall d'Hebron, unos 30 metros más adelante hay una rotonda donde ese turismo hubiera podido hacer un cambio de sentido sin provocar un caos circulatorio.
¿Llevaría GPS ese conductor?
:-)
Protegiendo el asiento del conductor (o sea, mí asiento)
Yo soy una máquina de sudar.
Y eso es un problema. Porque el asiento queda empapado y tarde o temprano empezaré a notar que la tapicería deja de ser todo lo bonita que es.
Por tanto he comprado una especie de cojín que se sujeta con una coma al respaldo, y cubre el asiento y el respado. Es de piel (sintética) y me ha costado unos 10 euros.
Por tanto, si se estropea, pues me compro otro y listos. Mientras, el asiento me lo agradecerá (metafóricamente, se entiende).
Y eso es un problema. Porque el asiento queda empapado y tarde o temprano empezaré a notar que la tapicería deja de ser todo lo bonita que es.
Por tanto he comprado una especie de cojín que se sujeta con una coma al respaldo, y cubre el asiento y el respado. Es de piel (sintética) y me ha costado unos 10 euros.
Por tanto, si se estropea, pues me compro otro y listos. Mientras, el asiento me lo agradecerá (metafóricamente, se entiende).
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